El padecimiento de un grupo de vecinos de Quilmes parece no tener fin. Desde hace más de cuatro meses conviven sin agua corriente en sus hogares, en un contexto donde la falta del servicio afecta directamente su calidad de vida. Se trata de un edificio de la calle Moreno esquina Ricardo Guiraldes, donde viven seis familias que desde el 10 de diciembre de 2024 denuncian no tener suministro regular de agua.
Según relataron los frentistas, el problema se debe a un caño tapado de AySA que se encuentra en la vereda, justo donde se conecta el ingreso principal de agua al edificio. Sin embargo, a pesar de los reiterados pedidos, la empresa jamás envió personal para revisar la conexión.
“Desde diciembre hicimos más de diez reclamos formales a AySA y nunca lo resolvieron. Ni siquiera mandaron una patrulla a revisar el caño. Cada tanto entra un hilo de agua, pero imaginate que para seis familias es imposible sobrevivir así”, expresó con indignación una de las vecinas afectadas.
Ante la falta de respuestas, días atrás los vecinos decidieron enviar una carta documento a la empresa prestadora del servicio, intimándola a dar una solución inmediata. Aseguran que no están en condiciones de seguir esperando, y que la situación se volvió insostenible.
Mientras tanto, las familias deben ingeniárselas para subsistir: Pedirle a otros vecinos, o llenar baldes cuando ese “hilo” de agua aparece por unos minutos. El malestar crece, y el reclamo por el acceso al agua, un derecho básico, se vuelve cada vez más urgente.