Escapadas

El rincón bonaerense que conquista con sus vinos serranos

Por: Redacción

Sábado, 04 de Enero del 2025 - 07:45 hs.

En los últimos años, la provincia de Buenos Aires ha comenzado a destacarse en el mapa vitivinícola argentino gracias al desarrollo de nuevas regiones productoras. Estos lugares emergentes apuestan por pequeñas producciones, vinos boutique y una conexión directa con la naturaleza, ofreciendo propuestas turísticas únicas que combinan paisajes encantadores con experiencias enológicas inolvidables.

La vitivinicultura no solo es un arte, sino también una forma de narrar la identidad de cada región. En suelo bonaerense, las características del terreno, el clima y las técnicas de elaboración han dado lugar a vinos con personalidad propia, conquistando a quienes buscan etiquetas auténticas y experiencias que combinan tradición, innovación y cultura.


La región serrana de Tandil combina naturaleza, tradición y enoturismo en su Ruta de los Vinos. Pequeñas bodegas boutique producen etiquetas únicas que ya cosechan premios nacionales, mientras que los paisajes y las actividades al aire libre completan una propuesta turística imperdible.


En Tandil, el gobierno de Axel Kicillof puso en marcha obras en el marco del Programa de Infraestructura Universitaria, con el que la Provincia de Buenos Aires busca reactivar en casas de estudio nacionales ubicadas en territorio bonaerense obras que el Gobierno Nacional dejó de financiar (en una primera etapa serán 20 proyectos). En este caso, se restaurará la fachada del edificio del Rectorado de la Universidad Nacional del Centro.

Tandil: vinos y paisajes que enamoran

Tandil, en el corazón de la provincia de Buenos Aires, está ganando protagonismo como un destino enológico destacado. Conocida por su icónico salame, quesos y el Cerro El Centinela, la ciudad ahora se posiciona como un punto clave dentro del enoturismo gracias a su Ruta de los Vinos, que combina producción boutique, paisajes serranos y experiencias únicas.




Un terroir único en Buenos Aires

El secreto de los vinos tandilenses radica en sus suelos serranos, el clima fresco con inviernos fríos y veranos moderados, y el cuidado en cada etapa del proceso productivo. Varietales como Malbec, Pinot Noir, Cabernet Franc y Sauvignon Blanc destacan por su calidad y autenticidad, logrando el reconocimiento nacional e internacional.



Las bodegas imperdibles de Tandil

La Ruta de los Vinos incluye visitas guiadas y degustaciones en bodegas emblemáticas como:

Bodega Cordón Blanco: especializada en vinos boutique con carácter serrano.

Bodega Cerro Blanco: pionera en producción orgánica y sostenible, con su Malbec como estrella.

Bodega Saldungaray: ubicada cerca de Sierra de la Ventana, es un ejemplo del potencial vitivinícola bonaerense.



Más que vino: turismo para todos los sentidos

Además de degustar vinos, la Ruta ofrece experiencias como caminatas por los viñedos, picnics, recorridos en bicicleta y vendimias participativas. Los maridajes con productos locales como quesos y embutidos potencian la experiencia, haciendo de Tandil un destino que deleita todos los sentidos.

El futuro de los vinos tandilenses

El auge de la vitivinicultura en Tandil avanza hacia el reconocimiento oficial como región vitivinícola, lo que impulsará aún más la industria y el turismo en la zona. Restaurantes, hoteles y guías han integrado propuestas enológicas, consolidando a Tandil como un destino ideal para quienes buscan naturaleza, gastronomía y buen vino.