El pasado domingo 8 de diciembre (día de la Virgen) los feligreses se acercaron a la emblemática catedral ubicada en el centro de Bernal esperando participar de la celebración vespertina, pero se encontraron con las puertas cerradas. La misa, que históricamente se realizaba a las 19 horas para facilitar la participación de quienes no pueden asistir durante la mañana, había sido eliminada del cronograma sin previo aviso.
"Es una falta de respeto a la tradición y a todos los creyentes", expresó una vecina del barrio y asistente frecuente de las actividades parroquiales. Otros intentaron comunicarse con el párroco o con las autoridades de la iglesia para entender las razones detrás de la decisión, pero hasta el momento no han recibido respuesta.
Según explicaron algunos fieles, actualmente la catedral ofrece misas únicamente en horarios matutinos, lo que dificulta la asistencia de una gran parte de la comunidad. "Semejante catedral, tan importante para los bernalenses, y ahora está casi vacía en los horarios que muchísima gente puede ir. Es muy triste", agregó otro asistente habitual.