Tras la renuncia de Becker y de otros miembros de la Comisión Directiva, el club calificó las acusaciones como "falacias" y atribuyó las tensiones a diferencias personales con el presidente Hernán Romero. “Lamentamos que los problemas personales lleven a descuidar responsabilidades y que se utilicen para dañar nuestra imagen”, expresa el comunicado.  

El club defendió la gestión en torno a los socios, asegurando que menos de la mitad del padrón mantiene deudas de cuotas sociales, pero que estas representan ingresos no percibidos, y no una deuda activa del club. Asimismo, mencionaron que la Comisión Directiva aprobó una propuesta de Becker para suspender a los socios con más de tres cuotas impagas.  

Respecto a la deuda de 35 millones de pesos con la ART OMINT, la institución afirmó que el dirigente conocía esta situación desde su llegada en julio de 2024. Según el comunicado, el ahora ex-tesorero no gestionó la deuda ni intentó negociar con los acreedores. “Como tesorero, informó, pero no gestionó, hasta que la ‘bomba explotó’ y ‘abandonó el barco’”, se lee en el texto.  

Además, la Comisión Directiva denunció un supuesto ataque al presidente Hernán Romero en la previa del partido contra Argentino de Melo, y condenó estas acciones calificándolas como "cobardes". El comunicado concluye con una advertencia legal: “Intimamos al señor Leandro Becker a que se retracte de las acusaciones realizadas, o esta Comisión Directiva se reservará el derecho de iniciar acciones legales por daños y perjuicios”.  

En medio de este clima institucional convulso, el club resaltó los avances logrados, como el crecimiento en el padrón de socios, proyectos de infraestructura como la iluminación del estadio, y la proximidad de los festejos por un nuevo aniversario de la institución.  

Mientras tanto, Argentino de Quilmes se prepara para disputar las semifinales del Torneo Reducido, buscando el ansiado segundo ascenso a la Primera Nacional, en un escenario donde los conflictos internos no pasan desapercibidos para los hinchas.