Willy Quiroga fue uno de los pioneros del rock nacional argentino, dejando un legado imborrable en la música. Junto a Ricardo Soulé, Rubén Basoalto y Juan Carlos Godoy, formó Vox Dei en 1967, banda que revolucionó la escena con su obra más icónica: "La Biblia" (1971), el primer álbum conceptual del rock nacional.  

La noticia de su fallecimiento fue confirmada por su entorno y rápidamente difundida por colegas, fanáticos y artistas, quienes inundaron las redes sociales con mensajes de homenaje y gratitud hacia el bajista, cantante y compositor.  

En sus últimos años, Quiroga continuó presentándose en vivo, llevando el espíritu del rock a cada rincón del país. Sin embargo, hace pocos meses se vio obligado a alejarse de los escenarios debido a problemas de salud que lo aquejaban y estaba internado en el Sanatorio Trinidad de Quilmes, ciudad a la que se mudó junto a su familia durante su infancia.

“Hola, amigos. Desgraciadamente, tengo que darles una noticia que jamás quise dar. A mis 84 años, con todas las ganas de continuar, me ha aparecido una enfermedad que no me permite cantar, ni tocar y continuar con la banda", anunció a través de sus redes sociales en aquel momento.

El fallecimiento de Willy Quiroga representa una pérdida enorme para la cultura argentina, pero su legado sigue vivo en las melodías y letras que acompañaron a varias generaciones. Su obra sigue siendo un faro para el rock nacional, recordándonos que su voz y su bajo nunca dejarán de resonar en el corazón de quienes aman la música.  

Hoy, el rock nacional y Quilmes lloran la partida de un grande, pero también celebran la vida de un hombre que dedicó su existencia a construir un sonido que permanecerá para siempre.