El Servicio Meteorológico Nacional emitió una alerta amarilla para Quilmes por tormentas con variada intensidad, algunas localmente fuertes, las cuales estarán acompañadas de intensa actividad eléctrica, ocasional caída de granizo y abundante caída de agua en períodos cortos. Se estiman valores de precipitación acumulada entre 20 y 65 mm, pudiendo ser superados en forma local.
Hacia finales del martes y comienzos del miércoles se producirán las dos jornadas más complejas a nivel meteorológico. Según informó el meteorólogo Christian Garavaglia de Meteored, esto "tiene que ver con la presencia de un frente que tenderá a estacionare en el centro de la Argentina, y el ingreso de una profunda e intensa zona de bajas presiones en altura, que forzará la ondulación del sistema frontal en superficie y la posterior formación de un ciclón extratropical hacia el centro-este argentino".
Durante esas horas, las lluvias y tormentas se irán generalizando e intensificando, avanzando desde el centro-oeste argentino hacia el este del país conforme sea el desplazamiento del área de bajas presiones.
Durante el miércoles, entraremos en la etapa más madura del ciclo de formación del ciclón extratropical, y las áreas de mayor riesgo en cuanto a lluvias y tormentas se mantendrán sobre Córdoba en la primera mitad del día, pero también luego se trasladarán hacia la región núcleo de Argentina, abarcando el sur del Litoral y el centro-norte bonaerense.
Será un miércoles superinestable en el centro del país, en donde el riesgo principal radicará en la cantidad abundante de agua que podría llegar a caer en pocas horas, en una situación propensa a que se produzcan inundaciones locales.
Entre las recomendaciones, el SMN advierte evitar actividades al aire libre, no refugiarse cerca de árboles y postes de electricidad que puedan caerse, estar atentos ante la posible caída de granizo. Además, para evitar que la normal circulación del agua se vea afectada recomiendan no sacar la basura y retirar objetos que impidan el paso. Y recalca permanecer alejados de playas, ríos, lagunas o piletas para minimizar el riesgo de ser alcanzado por un rayo.