El incidente se desencadenó cuando Albasetti realizaba una minuta de comunicación sobre la falta de seguridad en Quilmes y se preguntó en su discurso: «¿Qué tengo que pedir, patrullajes, cámaras?». Fue en ese preciso instante cuando un hombre desde el sector destinado a los invitados le respondió a viva voz: «¡Seguridad, concejal!».
De inmediato, tanto Albasetti como su compañero de bloque, Ricardo Rij, se pusieron de pie y comenzaron a aplaudir en señal de apoyo, mientras el resto de los invitados por la concejal acompañaban el reclamo al grito de «¡Seguridad!» y golpeaban cacerolas
El oficialismo no tardó en calificar lo ocurrido como un acto de provocación. Desde las bancas del Frente de Todos, se consideró que lo que hizo Albasetti fue “una bajeza absoluta” y que el “circo” montado por los manifestantes era “innecesario” en el contexto de un debate tan delicado como la inseguridad.
Este episodio generó malestar en el cuerpo legislativo, marcando un quiebre en la sesión, que se vio interrumpida por varios minutos hasta que la situación se normalizó.