El episodio de sangre ocurrió en una vivienda de la calle 125 y Pilcomayo. Allí habría comenzado una discusión entre la mujer de 25 años y el adolescente de 16, donde ella habría roto una botella de vidrio y se la habría clavado en el cuello. Tras ese suceso, la autora se dio a la fuga y la víctima fue trasladada de urgencia a la Unidad de Pronta Atención de Bernal Oeste, donde trataron de reanimarlo, pero no pudieron y perdió la vida.
Agentes de la policía realizaron dos allanamientos en casas del partido de Florencio Varela, en las que sospechaban que podía estar escondida la acusada, pero finalmente la encontraron en otra casa ubicada en las calles Thomas Álvarez y Olivero, en Ardigó.
En diálogo con los medios, la madre del adolescente dijo que la mujer “lo mató adelante de toda su familia y nadie lo ayudó. Son todos cómplices de la muerte de mi hijo”.
De acuerdo a lo detallado, ellos estuvieron en pareja por 2 años, pero se habían separado en las últimas semanas. “Ella no quería asumir que él la había dejado”, aseguró.
Otra de las situaciones narradas por la mujer es la de la violencia. "Se escondía porque ella le pegaba y venía todo golpeado a casa. También lo obligaba a hacer cosas: lo mandaba a robar”, señaló.
La causa quedó caratulada como “homicidio agravado por mediar relación de pareja”, a cargo del fiscal Martín Conde, de la Unidad Funcional N.º 3.