El hecho ocurrió en la calle Mozart entre Garibaldi y Humberto Primo del mencionado barrio, donde el árbol centenario no resistió la fuerza de los vientos y las lluvias, y terminó arrancado de raíz. El tronco y las ramas cayeron sobre una casa causando daños en la estructura.
Las ráfagas, que superaron los 100 kilómetros por hora, fueron tan intensas que derribaron el gigantesco ejemplar, el cuál con el empuje al caer sobre la morada terminó levantando la vereda unos cuantos centímetros del nivel del piso.
Los vecinos del lugar se mostraron consternados por lo sucedido y expresaron su solidaridad con la familia afectada, que afortunadamente no sufrió heridas de gravedad pero sí importantes pérdidas materiales en la propiedad. "Tengo el árbol tirado en la puerta de mi casa y es imposible entrar. Es un horror vivir así, necesitamos una respuesta lo más antes posible", relató a InfoQuilmes una de las víctimas.