En esta ocasión tuvo la participación de 70 artistas provenientes de 26 países y 4 continentes, con Argentina como país invitado de honor. Muralistas de Chile, Bolivia, Colombia, México, Honduras, Salvador, Costa Rica, Puerto Rico, Francia, India, Canadá, Reino Unido, Argentina, entre otros, dejaron su huella artística en este evento realizado del 11 al 18 de noviembre.

Entre los artistas seleccionados estuvo nuestra muralista quilmeña Daniela Anzoátegui, referente del muralismo en la región, conocida por su mameluco color violeta y sus murales que reflejan la identidad de Quilmes. La organización estuvo a cargo del Grupo Cultural La Fortaleza con sede en México, coordinado por el gestor cultural José Ventura Corona Bruno en colaboración con la comunidad de Morelos y el apoyo del Movimiento Internacional de Muralistas Ítalo Grassi, que tiene su sede en Argentina, el cual es coordinado por Raúl Orozco.

Durante el evento nuestra muralista de Quilmes realizó un mural de 14 metros cuadrados con técnica de pintura y temática feminista: “Me propuse crear un mural de manera comunitaria, donde las personas que viven ahí puedan ser parte de la idea, pero también pintando. Por eso, charlando con vecinos, elegí pintar a dos niñas de la comunidad junto a la palabra “sororidad”, que hace referencia a la solidaridad entre mujeres. Mi objetivo es que reflexionemos sobre el presente y futuro de las nuevas generaciones, en especial de las niñas y diversidades que tienen el derecho de habitar un mundo en igualdad de género”, señalo la artista.

El evento celebró, además, el centenario del muralismo mexicano, un movimiento que nació en 1922 desde el estado para educar a través de las imágenes. Aquellos primeros muralistas fueron Diego Rivera, David Siqueiros, Clemente Orozco, Aurora Reyes, quienes crearon murales para poner en valor la identidad mexicana en un México desbastado por la dictadura, la guerra y la revolución.

Sobre la experiencia vivida la artista nos cuenta: “Haber sido seleccionada en este evento que se realizó desde la cuna del muralismo es para mí maravilloso, ya que es un reconocimiento al esfuerzo, la pasión y el amor que le pongo cada día a esta hermosa profesión que vengo ejerciendo hace diez años. Trabajar en el arte público es un enorme compromiso. Significa concientizar a través de las imágenes sobre los problemas que vivimos, como es la perdida de las identidades de los pueblos originarios, la desigualdad de género, el cambio climático. Por eso, estoy muy emocionada de haber participado y haber conocido grandes artistas, tanto de mi país, como de países de todo el mundo", finaliza la artista.

Daniela, una joven muralista con un futuro prometedor, nació en Quilmes en 1994. Se graduó de la carrera de Muralismo de la Universidad Nacional de La Plata, y ha realizado mas de 40 murales en el país. En Quilmes ha pintado el mural “Héroes de Malvinas” en la cancha de Quilmes, también a la cacique de los Kilmes Isabel Pallamay –ubicado en Alem y Mitre-; a la poetisa de Bernal Adela Salaberry, entre otros. Ejerce como docente en la Universidad Nacional de La Plata, en la Escuela de Bellas Artes de Quilmes y en el IMPA.