En las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) del 13 de agosto de 2021, Milei sorprendió al obtener el 30% de los votos, ubicándose en primer lugar. En las elecciones generales del 22 de octubre, Milei se mantuvo en el 30% de los sufragios, lo que le permitió acceder al balotaje, dejando afuera a Bullrich, que quedó en tercer lugar con el 24%. Massa, por su parte, ocupó el primer puesto, con el 36,7%

La campaña para el balotaje estuvo marcada por el contraste entre los dos candidatos, que representaban dos modelos de país antagónicos. Massa se presentó como el candidato del consenso, el diálogo y la moderación. Milei, en cambio, se erigió como el candidato de la ruptura, el cambio, la confrontación y la rebeldía. 

El resultado del balotaje fue una sorpresa para propios y ajenos, ya que la mayoría de las encuestas previas daban como ganador a Massa. Sin embargo, el economista libertario logró capitalizar el descontento de una parte importante de la sociedad argentina, que se siente defraudada por el gobierno de Fernández, y por la oposición tradicional, y que busca una alternativa disruptiva al sistema político vigente.

Milei asumirá la presidencia el próximo 10 de diciembre, con el desafío de gobernar un país sumido en una profunda crisis económica, social, sanitaria y política, y con una oposición mayoritaria en el Congreso, que le dificultará la implementación de sus medidas. Su gestión será seguida con atención y expectativa por el resto del mundo, que observa con asombro el surgimiento de un fenómeno político inédito en la historia de la Argentina, y de América Latina.