El hecho ocurrió el sábado por la noche, más precisamente a las 20:15 horas, cuando personal de la Comisaría 8° recibió un alerta por la presencia de intrusos en el exclusivo barrio cerrado “Nuevo Quilmes”, ubicado en la calle Caseros al 1750 de Don Bosco. 

Los efectivos se dirigieron al lugar y se entrevistaron con el personal de seguridad privada, que los acompañó hasta la casa donde sonó la alarma. 

Al revisar la propiedad, que se encontraba sin moradores, no hallaron a nadie dentro del patio pero escucharon gritos provenientes de otro lote, donde un vecino les indicó que vio a dos hombres vestidos de negro salir corriendo e ingresar a una finca del frente. 

Los policías se trasladaron a esa vivienda y constataron que los sospechosos habían saltado el alambrado del fondo hacia la calle Carabelas.

Los uniformados salieron del barrio privado y comenzaron un rastrillaje por la zona, logrando interceptar a uno de los ladrones, de 41 años y nacionalidad uruguaya, quién intentó evadirlos .

El malviviente llevaba una riñonera negra con siete relojes, joyería variada, un pin del Colegio de Abogados de Capital Federal y elementos de corte como una pinza y una barreta.

Entre sus pertenencias también se encontraron unas llaves y una cédula verde de un vehículo Fiat Siena, que fue hallado estacionado a unos 300 metros del lugar donde se fugaron los malhechores. El rodado fue secuestrado por la policía como elemento de prueba.

El fiscal en turno avaló lo actuado y ordenó que el hombre quedara aprehendido por los delitos de “violación de domicilio y tentativa de robo”. Además, se iniciaron actuaciones para dar con el paradero del otro cómplice, que se encuentra prófugo.