El hecho ocurrió este viernes en la intersección de las calles 897 y 864 del mencionado barrio, cuando la femenina se encontraba en la vía pública y debió comenzar de emergencia con las tareas de parto.
Afortunadamente, personal de la Policía Local de Quilmes que patrullaba la zona se percató de la situación y solicitó asistencia médica y refuerzos policiales. Al lugar llegaron los sargentos Jaquelin Pardo y Alejandra Aguirre del Comando de Patrullas Quilmes, y los oficiales Martín Avalos y Brenda Puebla, quienes asistieron a la parturienta y a su bebé.
La recién nacida se estaba poniendo morada, por lo que la sargento Aguirre le practicó maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) que había aprendido en un curso de reentrenamiento. Gracias a su rápida intervención, el neonato logró respirar y recuperar el color.
Poco después, llegó una ambulancia del SAME que trasladó mediante un cordón sanitario a la madre y a la niña al Hospital Dr. Eduardo Oller de San Francisco Solano. Según fuentes médicas, la infante se encuentra en buen estado de salud y bajo observación en la sala de neonatología.