El hecho fue descubierto el domingo por la mañana, cuando el trabajador encargado del puesto situado en la Avenida Espora llegó y se encontró con una terrible escena. Durante la madrugada delincuentes rompieron la puerta del lugar donde ellos pasan sus jornadas y guardan los materiales.
Según informó el sitio QuilmesAhora, los ladrones robaron todo el material de trabajo e incluso los elementos personales de los trabajadores públicos. Trajes de neoprene, buzos, pantalones, handy, zapatillas, estufa, capas de lluvia, pava eléctrica y hasta el torpedo. Lo más repudiable es que también se llevaron el Desfibrilador Externo Automático, la herramienta que utilizaron muchas veces para salvarle la vida a los vecinos. Sin embargo, esa misma tarde apareció en un campo cercano el DEA, un handy y un parlante.
Tras esta situación los guardavidas han pedido a la comunidad que preste atención si les ofrecen estos elementos robados para venderlos, y están casi seguros que los delincuentes son del barrio.