El siniestro vial tuvo lugar en el cruce de las calles 389 y Perón. Por razones que al momento se investigan, el conductor perdió el control del vehículo, se subió a la vereda donde por poco embistió a un peatón y se estrelló contra un masetero de ladrillos, que de alguna forma actuó como muralla para proteger la vivienda en la que hubiera terminado el auto de haber continuado la trayectoria.
Personal de la Policía Bonaerense se comisionó en el lugar junto con médicos del SAME y agentes de Tránsito de la Municipalidad de Quilmes. El control de alcoholemia le arrojó un resultado de 1,81 gramos por litro de alcohol en sangre. Además el conductor no tenía ni licencia ni seguro del vehículo, que quedó automáticamente secuestrado.
Asimismo, se informó que el sujeto fue trasladado por una ambulancia al Sanatorio Bernal ya que presentaba traumatismo contuso en hombro izquierdo y en la rodilla izquierda, además de un corte leve en el labio.