El hecho ocurrió cerca de las 14 horas de este martes en un domicilio ubicado en la calle Primero de Mayo y Azcuénaga. Allí ingresaron delincuentes aprovechando que la dueña no estaba y tomaron cautiva por unos minutos a su hija de 15 años. Luego de un tiempo llegó la mujer, abrió la puerta y se encontró con los malviventes dentro de su casa.
Intentó huir pero los ladrones la tiraron al piso y la arrastraron nuevamente al interior del domicilio. Afortunadamente en ese momento la víctima logró gritar y poner en alerta a sus vecinos, quienes activaron sus alarmas y llamaron a la policía, lo que puso en fuga a los asaltantes.
Según informó la señora, los delincuentes llevaban guantes y un inhibidor de alarma, lo que hizo desactivar el dispositivo de la vivienda y así poder ingresar sin ser escuchados. "Esto tiene inteligencia, ya veníamos viendo en el barrio que había gente que sacaba fotos a las casas desde autos", señaló. Y aseguró que tiene miedo ella junto a sus vecinos, porque "los robos en la zona son constantes y las entraderas ocurren muy seguido".