Dos adolescentes, uno de ellos menor de edad, terminaron detenidos y hospitalizados luego de protagonizar junto a otros dos un feroz raid delictivo en el que sustrajeron 21 teléfonos celulares. La Policía los persiguió por Bernal Oeste hasta que chocaron con un patrullero y se enfrentaron a tiros con los oficiales.
Sucedió el viernes por la tarde, cuando cuatro motochorros armados asaltaron a numerosas víctimas en las jurisdicciones de Avellaneda y Quilmes. El personal policial se encontraba alerta ya que se había notificado sobre la serie de robos cometida desde horas tempranas. Fue así que un móvil del Comando de Patrullas detectó a los sospechosos en el cruce de las calles Ragucci y 198, quienes ante la voz de alto emprendieron velozmente la fuga.
Esta actitud dio inicio a una rauda persecución a la que se acoplaron varios móviles de la Comisaría Quinta en apoyo y que se extendió por casi 4 kilómetros hasta la intersección de la calle Montevideo y 171, donde los motociclistas perdieron el control e impactaron contra un patrullero. Herido en el lugar fue aprehendido uno de los sindicados, de 19 años, mientras que los tres restantes se reincorporaron rápidamente para continuar la huida a la carrera.
El seguimiento continuó a pie algunos metros por los pasillos de un asentamiento de la zona, circunstancias en que -según indicaron las fuentes intervinientes- los delincuentes comenzaron a disparar contra los uniformados. Uno de los oficiales repelió la agresión con su arma reglamentaria, sin llegar a herir a ninguno de los maleantes. No obstante, esto permitió atrapar a un menor de 17 años, mientras que los dos restantes lograron perderse en la villa.
En el lugar de los hechos las fuerzas de seguridad secuestraron una mochila que contenía 21 teléfonos celulares de distintas marcas y modelos que habrían sido sustraídos durante el raid, además de billeteras con documentación de las víctimas y dinero. También incautaron un revólver calibre 22 con cuatro cartuchos intactos y seis vainas servidas, y las dos motocicletas utilizadas durante la persecución, una de las cuales tenía pedido de secuestro por haber sido robada en Avellaneda el pasado 15 de julio.
Los dos aprehendidos fueron trasladados al Hospital Iriarte de Quilmes para recibir asistencia médica, dado que se encontraban lesionados por la colisión. El menor de ellos recibió el alta luego de algunas curaciones, mientras que el restante permanece internado con custodia policial, aunque fuera de peligro.
La causa penal quedó en manos de la Fiscalía de Responsabilidad Penal Juvenil N° 1 de Lomas de Zamora, que imputó a los detenidos por “robo agravado por el empleo de arma de fuego” y ordenó que queden alojados en la Comisaría Sexta de dicho distrito.