Según un comunicado del RDIF, el primer lote producido se trasladará al Instituto Gamaleya para realizar el control de calidad correspondiente. Por su parte, está previsto que la producción a gran escala de la Sputnik V en Argentina, desde donde se prevé su exportación a otros países de Centroamérica y Latinoamérica, comience «en junio». Actualmente, el laboratorio tiene la capacidad de producir un millón de dosis al mes, escalable hasta 5 millones.

El presidente argentino, Alberto Fernández, que destacó el acuerdo entre el RDIF y Laboratorios Richmond cuando se firmó, en febrero, ha comentado que el país latinoamericano está «muy entusiasmado» con la posibilidad de producir la vacuna en el territorio, donde «ya está protegiendo a una gran parte» de la población «con excelentes resultados». «Será una gran oportunidad para avanzar en la lucha contra la pandemia, no solo en Argentina, sino también en Latinoamérica», agregó

Argentina fue el primer país latinoamericano en registrar oficialmente la vacuna Sputnik V y comenzó a aplicarla a la ciudadanía el 29 de diciembre de 2020. Actualmente, está registrada en 60 países. La eficacia de la vacuna (con las 2 dosis) es del 97,6% según el análisis de los datos sobre la tasa de infección por coronavirus entre los vacunados en Rusia con ambos componentes del Sputnik V